BOCAS CON LABIOS DE TRANVÍA

BALCONES


Y

TRANVÍAS

 Si viajar por tranvías y autobuses

 fuese igual que permanecer

sentado, en el mirador de la casa

con más solera del lugar

- la que da la plaza  principal y  su paseo-,  

y allí, declinar el sueño, alertar

los sentidos y mirar cómo pasa

la gente , sus cenizas, sus fantasmas,

 los recuerdos cambiando de mano,

las tribulaciones con nombre y apellido.

Si supieses  como vive  ese balcón

y  sus pecados, sabrías  sentarte

a platicar con las dudas.

Te sería familiar la noche que duerme

en las sonrisas,

los torpes secretos que recorren las aceras.

Sabrías que un autobús gastado

y un ventanal expuesto al mediodía

son observatorios de costumbres,

palcos del teatro de la vida

y , en ocasiones, bocas  con labios de tranvía.

Imagen en http://www.bibliocad.com/biblioteca/balcon-3d_7986