Entradas

Mostrando entradas de marzo, 2015

SIN TI ME ROMERÍA,II

Imagen
    Déjame, madre, que muera yo primero, que no entiendo esta vida tan vida, que la idea ni la quiero ni soportaría la de quedarme solo y descompuesto, la de no verte más que en mis sueños Iván Mendoza Marrodán Déjame, hijo, que te diga,  que no puedo cederte el privilegio. Que me rompo si te dueles un instante Que soy aire si el aire a ti te falta Que me torno pan si precisas alimento -y no hablo solo del pan de cada día-. Déjame que te diga que no puedo concederte, por esta vez, ese deseo. Que no es por lo que queda o lo que hubo, que es por esa arboleda que aún aguarda las huellas profundas de tus pasos, nuestro tapiz de versos como espadas y también los labios como versos, pues juntos somos sándalo y tomillo que perviven. Que nos quedan todas tus esquinas de alegría, todos los espejos de mi amor en el secreto de tu viento enamorado. Que no he de morirme, porque siempre está contigo mi esencia, mi verso mi querencia. Y siempre estás en mi sonrisa,

AMOR EN PROPIA SANGRE

Imagen

LEER TU NOMBRE

Imagen
Leer tu nombre no es tan fácil cuando es la esquiva línea de tu boca quien descorcha la noche  y la noche calla los pecados. Otras veces, vale la pendiente de tus ojos en el jazmín de mi prisa, o un cuarteto despeinado por tus manos de fuego,o disolver el calendario  cuando manifiesta un rotundo desacato a la ordenanza sagrada de los besos. Y entonces, entonces, sí  cualquier cara de la luna se nos hace  suficiente  para acatar el mandamiento de esculpir  ese amor  que nos desmanda  y nos hace florecer. Leer tu nombre no es tan fácil en las arboledas amargas del silencio, sin embargo, nada cuesta, nada, en la hoja que, azul, tilila melancólica.

RECITAL A FAVOR DE UNICEF

Imagen

HUÉRFANOS DE PAN

Imagen
Me afligen las piedras del mal, no es nada extraño. Me extenúan las voces infantiles hambrientas y dolosas, a la par que se proclama el fin de la miseria, el arcoíris de un trabajo de barro Me corta la respiración la manta como resto de un hogar desahuciado por desidias y ambiciones. Me queman las pestañas y la sangre ver los trenes con destino al paraíso        y las estaciones huérfanas de pan.

PUNTO A LA FUGA

Imagen
A veces, quiero volver, recuperar el cielo de ese día de verano y la prisa en la alberca. Y el relincho, el ladrido, el vestido de fiesta, el revuelo del horno y los hermanos. el recorte azul brillante que se ve desde el balcón que da al patio en la casa valenciana. Por una vez, una tan solo, ser los ojos que ven la niña que fui, ver la familia que entonces era playa, lugar de encuentro y deseo de vuelo. A veces quiero volver al cuarto parental de impolutas paredes, a la espiral del cabecero que hoy gobierna mi alcoba, al ruido del misterio en la cómoda, al encaje en la sonrisa de mi madre. A veces, digo, y por el breve espacio de recrearme en esa escena matinal del bruñido domingo en mi infancia. Pero entonces, comprendo a mi pesar, que me voy tornando, sobre la estampa del mapa familiar, una líquida tangente,            un punto a la fuga.